Ante una denuncia, la Policía dio con un hombre de 25 años, que recientemente había ingresado a un domicilio de calle 63 al 2900 con un cortaplumas, y previa amenaza a un nene de 12 años se llevo $1.000.

Anteriormente 3 robos de similar características se habían producido por la zona. Tras recabar datos de testigos y luego de un breve rastrillaje, una patrulla dio con el sospechoso, que tenía un corte en uno de sus brazos y respondía a las descripciones ocasionales.

El sospechoso era conocido en el barrio y terminó detenido por “robo agravado en flagrancia”.