El comienzo legislativo del año 2017 arrancó sin sorpresas y sin nada raro, en general todo en las expectativas de todos. Mancino, a diferencia de López entregó su discurso por escrito a todos los concejales y lo curioso que estaba en el segundo párrafo el saludo a Roberto Rago, quienes ambos agradecieron en el uso de la palabra en el recinto dando comienzo al ciclo legislativo 2018. Mancino quiso hacerse el picante, pero estuvo flojo de pimienta. Y López habló de largo plazo, cuando no se llega a fin de mes. Mancino hablando de austeridad, con el despilfarre de empleados en el Concejo Deliberante no debería ni hablar

El intendente habló de obra pública, en términos generales lo “más mostrable” de su gestión al frente del municipio este tiempo, una carencia total en su discurso de temáticas vinculadas a gran parte del municipio como la crisis en la Salud. López no es ingenuo, buscar mostrar que tiene un proyecto a largo plazo y que este es el comienzo, aunque sabe que tiene un escollo, puesto que su espacio el massismo hoy debate para si su continuidad como vía electoral o su disolución provincial en Cambiemos o Unidad Ciudadana. López quizá deba ir en boleta corta repartiendo de todos los candidatos o como “colectora” Cambiemos.

Ernesto Mancino presidente del Concejo, Cambiemos-PRO, también juega a fondo la partida. Habló de “transición” hacia el final de su discurso y algunos especulan con que vaya de intendente en 2019 ¿Será una opción para él? Puede ser, depende de lo que haga como edil y presidente del cuerpo. La interna de Cambiemos está que arde y hoy Rojas no parace la opción segura , todos buscan el sillón de Murga (del intendente).