La investigación de la Comisión advirtió que la “desidia” oficial sometió al “desamparo” a los familiares
ARA San Juan: la Bicameral subrayó la responsabilidad del Gobierno
“Es indudable la responsabilidad política del Gobierno Nacional, a través de su Ministerio de Defensa”, planteó el informe de la Comisión del Congreso. Habla de “destratos” hacia los familiares y “ocultamiento” de información.
Por Carlos Rodríguez

En el Informe Final de la Comisión Bicameral que investigó el hundimiento del submarino ARA San Juan, se señaló que es “indudable la responsabilidad política del gobierno nacional, a través de su Ministerio de Defensa por esta tragedia que se cobró las vidas de 44 argentinos”.

Además de centrar la responsabilidad en la cartera a cargo de Oscar Aguad, el titular del cuerpo legislativo, el senador José Antonio Ojeda, dijo que “también es indudable” que el presidente Mauricio Macri “tiene un grado de responsabilidad ” por su condición de comandante en jefe de las Fuerzas Armadas. En el documento se señalaron, además, las “responsabilidades palmarias” de los altos mandos de la Armada.

El dictamen fue firmado por los 12 integrantes de la comisión, pero los legisladores oficialistas lo hicieron en disidencia, en todo lo relacionado con las responsabilidades políticas de las autoridades nacionales.

En el caso del ministro Aguad, se puso énfasis en “la falta de las diligencias adecuadas” porque el submarino “se encontraba realizando, según el Poder Ejecutivo Nacional, el mayor ejercicio naval de los últimos 30 años”. Ante semejante acontecimiento, no se tuvo en cuenta que la nave tenía “más de 30 averías o fallas técnicas previas a la autorización de la misión encomendada”. El informe, que se presentó en el Salón de los Pasos Perdidos, del Congreso Nacional, llegó a su fin luego de 16 meses de trabajo, 80 medidas probatorias, 55 reuniones entre sus integrantes y cerca de 50 declaraciones de testigos calificados.

A esto se le sumó el hecho de que el buque “debía ingresar a dique seco, es decir llevarlo a instalaciones portuarias para realizar las revisiones y/o reparaciones correspondientes, cada 18 meses”, pero al momento de su partida “llevaba más de 44 meses” sin cumplir con ese requisito indispensable. Esa falencia “limitaba su operatividad en profundidad”. Por esos motivos, a partir del 15 de noviembre de 2017 se produjo “una de las mayores tragedias mundiales de la historia naval en tiempos de paz y la más grave para nuestro país tras la Guerra de Malvinas”.

Uno de los reproches centrales tiene que ver con “el desamparo al cual fueron sometidos los familiares de los 44 tripulantes, por el destrato, el ocultamiento de lo que verdaderamente estaba sucediendo, lo que llevó al encadenamiento en Plaza de Mayo por la desesperación, la falta de criterio, de profesionalismo y empatía de los responsables políticos del Ministerio de Defensa”. En consecuencia, además de su función específica, la Comisión tuvo que “trabajar en la contención de los familiares ante la falta de respuesta del Poder Ejecutivo”, representado por el presidente Macri.

En el informe, la Comisión sostuvo que “los responsables políticos manipularon la verdad de la información a los familiares desde los inicios” porque “ante los indicios de la gravedad de los hechos, en lugar de agilizar sólo dilataron la contratación de la empresa que se dedicaría a la búsqueda de la nave” y las familias tuvieron que permanecer 55 días encadenados, hasta revertir esa situación. Por la actitud asumida, se puntualizó que el gobierno tuvo “la intención de atribuir culpas solo a la Armada Argentina, cuando es el propio Ministerio de Defensa, como autoridad de aplicación correspondiente quien debe velar en todo momento por la seguridad y es responsable de la verificación de toda la estructura bajo su mando”. El cuestionamiento llega al punto de afirmar que de no haberse constituido la comisión legislativa “la continuidad de la búsqueda y localización, no hubiera ocurrido”. La Bicameral aseguró que el Ejecutivo “intentó que la tragedia del ARA San Juan pasara rápidamente al olvido”