Pese a estar atravesando un mercado de pases lleno de frustraciones y negociaciones infructuosas, Boca sigue apuntando alto.

El último nombre que trascendió que interesa dentro de la dirigencia, es el chileno Paulo Díaz, quien desde hace un tiempo es el máximo anhelo de Marcelo Gallardo para River. El muñeco dejó bien en claro que es el único refuerzo que quiere.

El problema por el que Díaz aún no es jugador de River es que los clubes no se ponen de acuerdo en el monto a pagar por el pase. Boca tiene la ventaja de que lo económico no es un problema, y puede estirarse un poco más que su eterno rival. El problema es que el jugador tiene en la cabeza que quiere jugar en River, y el Xeneize deberá trabajar para hacerlo cambiar de opinión.

Díaz sería un refuerzo de gran jerarquía para cualquiera de los dos equipos. Durante su paso por San Lorenzo mostró una gran capacidad para adaptarse a todos los puestos de la defensa, además de tener un extraordinario juego aéreo que le permite ganar en las dos áreas. Todo indica que quien tiene todas las de ganar es River, pero ojo con que no llegue una oferta superadora desde Boca y sacuda el mercado.